Presencia

Nuestra presencia, en la histórica y entrañable Triana, no es casualidad. Como podrás advertir por la lectura de nuestros principios, tenemos un credo espiritual que se remonta a los tiempos de las enseñanzas apostólicas contenidas en la Palabra de Dios: La Santa Biblia.

No formamos parte de ninguna secta seudocristiana sino de la Iglesia universal de la que Cristo es la Cabeza. El arraigo de la comunidad evangélica en Sevilla, interrumpida en el siglo XVI por obra de la Inquisición, pero que volvió a resurgir a partir de de 1868, es notable, y ha hecho un aporte generoso y positivo a la comunidad. Este notable arraigo ha quedado avalado por los acuerdos firmados con el Estado en 1992.

En el caso particular de nuestra congregación: «Betania», cuya andadura se inició a finales de los años 60 en Ciudad Jardín (Nervión), para luego trasladarse al barrio de la Macarena (Fray Isidoro de Sevilla 7, trasera), y llegar en 1992 a Triana, empujada por su crecimiento que demandaba un edificio más amplio, C/ Castilla nº 63, acorde con su necesidad.